La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia ha abierto una investigación formal contra el senador del Partido Verde, Jonathan Ferney Pulido Hernández, mejor conocido como “Jota Pe Hernández”, por un presunto plan para manipular testigos y enlodar la imagen del exsenador y exembajador Roy Barreras.
La decisión del alto tribunal se produce luego de que varios testigos clave, citados inicialmente en un caso por calumnia y hostigamiento contra Barreras, cambiaran el curso de la investigación. En lugar de incriminar a Barreras, los declarantes han señalado directamente a Hernández de haber orquestado un montaje mediático.
La denuncia inicial de Roy Barreras
La génesis de este proceso se remonta a 2023, cuando Roy Barreras denunció a Jota Pe Hernández por acusarlo públicamente de liderar una “olla podrida” de corrupción. Hernández, en un trino y en sus populares video-denuncias, señalaba a Barreras de estar detrás de contratos de más de 4 mil millones de pesos con la empresa Dicitec S.A.S. para la operación del Canal del Congreso.
Sin embargo, en el marco de la investigación, el magistrado Francisco Farfán escuchó los testimonios de exfuncionarios del Canal del Congreso, entre ellos Kilian Torres Rojas, Catherine Torres Rojas y John Jairo Uribe Muñoz. Sus declaraciones no solo eximieron a Barreras, sino que expusieron un supuesto plan de Jota Pe Hernández para fabricar testimonios falsos.
Promesas de dinero y viajes: El presunto plan de manipulación
Según los testigos, el senador Hernández les habría ofrecido una serie de beneficios a cambio de declarar en contra de Barreras. Las presuntas dádivas incluían:
- Un contrato en el Congreso de la República que podría cobrarse sin necesidad de trabajar.
- Gestiones para obtener asilo en otro país.
- La posibilidad de seguir cobrando su salario sin presentarse a laborar.
Un testigo afirmó incluso que el senador grabó una de estas conversaciones en su celular personal. La Corte Suprema consideró este testimonio, junto con los demás, como un indicio de la gravedad de los hechos, lo que los llevó a abrir una investigación por posible soborno y manipulación de testigos.
Los declarantes también mencionaron que el objetivo de Hernández era conseguir que se hicieran pasar por víctimas para sustentar su relato mediático contra Roy Barreras. Sin embargo, denunciaron que una vez que colaboraron, el senador no cumplió con lo prometido y dejó de responderles.
Un futuro judicial incierto para el Senador
La decisión de la Corte Suprema de Justicia marca un punto de inflexión en este enfrentamiento mediático y judicial. La investigación anterior, abierta en marzo de 2025, se amplía ahora para incluir directamente el presunto delito de manipulación de testigos.
De confirmarse las acusaciones, el senador Jota Pe Hernández podría enfrentar sanciones penales y disciplinarias. Este nuevo proceso pone en una posición delicada a uno de los congresistas más mediáticos del país, dejando al descubierto una posible trama de falsos testimonios que, de ser cierta, pondría en duda la credibilidad de sus denuncias públicas.
La investigación continuará en curso en la Sala de Instrucción de la Corte Suprema, con la expectativa de que el senador Pulido Hernández sea llamado a dar su versión sobre los graves señalamientos en su contra.